l

La Vitalidad es el presente. Todo está en la vida y es la vida, los cuerpos mueren pero la vida continúa, es eterna. Siempre se está en medio de la vida y la vida en medio de nosotros. Nos atravisa para llegar a otros, así como atravesó a otros, para llegar hasta nosotros. La vida es incontrolable, poderosa, inalienable, misteriosa, creativa. La vida es salvaje: es el amor.



sábado, 24 de diciembre de 2011

La Teoría de los afectos en Spinoza

Para Deleuze los conceptos de affectio, afección, y affectus, afecto, concretados en una teoría de los afectos constituyen el elemento fundamental del pensamiento de Spinoza, de tal manera que llega a afirmar que esa teoría es el tema de la Ética,[1] obra capital de Spinoza, y que sin ella, no es posible entender adecuadamente el edificio teórico spinozista pues constituye su piedra de toque, el centro desde el cual van adquiriendo sentido teórico y práctico las audaces propuestas y críticas de la filosofía de Spinoza dirigidas a comprender e incidir en las dimensiones más reales, vitales y estratégicas de la existencia humana.

Y es que si bien, la literatura spinozista y la tradición filosófica en general han puesto el acento de la lectura o interpretación de la obra spinozista ya sea en el concepto de Dios o en el de conatus, para Deleuze los conceptos fundamentales son los de affectio y affectus[2] en relación con el de potencia, como se puede advertir en la obra deleuzeana directamente dedicada a Spinoza: Spinoza y el problema de la expresión de 1968, el Spinoza de 1970, su Spinoza una filosofía práctica de 1981 y en los cursos de Vincenns dedicados a Spinoza recientemente publicados en Argentina con el título En medio de Spinoza,[3] en los cuales el elemento orientador de la perspectiva y articulador de la concepción de la obra es la teoría de los afectos; y de una manera indirecta pero constante a lo largo de toda su obra, en la que desde su concepción spinozista abordó los más diversos temas haciendo llegar el spinozismo a través de trescientos años a problemas y realidades del siglo XX y principios del XXI al tratar problemas psicológicos, metafísicos, políticos, económicos, literarios e incluso revolucionarios en libros como el Antiedipo, Mil Mesetas, Crítica y Clínica o Lógica del Sentido, trabajos en los que sin dejar nunca de ser deleuzeanos permiten sentir y ver siempre una perspectiva spinozista como la atmósfera de un viento afirmativo que jamás abandonó a Deleuze o como un río subterráneo que lleva en su cause toda la fuerza y el rigor de los conceptos de Spinoza, y cuando es necesario, incluso salen a flote o continúan con su discreta y permanente presencia.

Para entender la teoría de los afectos, Deleuze nos ofrece una imagen sumamente didáctica de lo que sucede en el pensamiento a través de la imagen de dos líneas, una línea de serie y una línea de variación puesto que no hay que perder de vista que de lo que se trata siempre es del pensamiento, sólo que como advirtió Spinoza y constantemente nos recuerda Deleuze, el pensamiento no es sólo representativo sino también afectivo, así como de una manera visionaria, que parece adelantarse por doscientos años al psicoanálisis, que el pensamiento no es la consciencia sino que ésta surge de él en su calidad de inconciencia.

La teoría de los afectos trata del pensamiento y al hacerlo, en los términos del sistema spinozista, trata de Dios, y con ello, de la potencia y de la existencia ya que, como señalamos, el spinozismo es un existencialismo, el más absoluto y radical que haya existido al concebir la totalidad del ser como una unidad con un mismo sentido en la que todo participa a su “modo” de la totalidad del ser, existencia...

Cuento yaqui-revolucionario "Filibusteros".

*El año gregoriano termina, seguramente existen otros cíclos y otros calendarios más significativos, ya se mira clarear el horizonte o los primeros anuncios de la noche. Vuelvo a colocar esta entrada al inicio del blog debido a la frecuencia con la que ha sido visitada y comentada. Gracias a todos los que han leído el cuento, que es una de las mayores alegrías que tuve este año. Es cierto esto de la era digital y la autopublicación, todavía no se sabe cuando saldrá el libro publicado en la UNAM y más de 700 personas ya casi el tiraje total, han leído el cuento.

Un saludo para todos los amigos, hermanos y cómplices de este blog y de la multitud que habita en mi interior, estamos de fiesta, con gran griterío y baile que compartimos con ustedes, porque el cuento "Filibusteros" ganó el concurso de cuento de la Facultad de Filosofía y Letras "Inventar las revoluciones".

El cuento trata de expresar la concepción americana de la revolución, una concepción fundada en una particular mitología y forma de concebir el tiempo y el mundo, una racionalidad particularmente diferente que piensa la revolución en otros términos: el mito, la tradición, el sueño, la magia, el pasado; diferente al tiempo lineal del progreso y la racionalidad occidental. Creemos profundamente en que es posible construir otro mundo donde quepan muchos mundos, y que para hacerlo, tenemos que mirar  hacia esos otros mundos que ya han existido, los mundos de los pueblos originarios e indígenas.

Salud, Amor y Anarquía.

ATT.
     El autor como productor.
A continuación adjunto el cuento. ¡Disfrútenlo!

viernes, 9 de diciembre de 2011

UNA MUERTE... O UNA VIDA. Carta del Subcomandante Marcos. (Diciembre 2011)

I.- El poder del Poder.

“La libertad de elección te permite elegir la salsa con la que serás comido.”
Eduardo Galeano. “Ventana sobre las Dictaduras Invisibles” Ibid.

“Qué nos gobiernen, juzguen y cuiden las putas, ya que sus hijos nos han fallado”
Tomado del blog laputarealidad.org

Debo haberlo leído o escuchado en alguna parte. Era algo así como “el Poder no es tener mucho dinero, sino el mentir y que te crean muchos, todos, o al menos todos los que importan”.

Mentir en grande y hacerlo impunemente, eso es el Poder.
Mentiras gigantes que incluyen acólitos y feligreses que les den validez, certeza, estatus.
Mentiras hechas campañas electorales, programas de gobierno, proyectos alternativos de nación, plataformas partidarias, artículos en periódicos y revistas, comentarios en radio y televisión, consignas, credos.
Y la mentira debe ser tan grande que no sea estática. Que cambie, no para hacerse más efectiva, sino para probar la lealtad de sus seguidores. Los malditos de ayer serán bendecidos apenas pasadas unas hojas en el calendario.
¿Es el Poder –o su cercanía- el gran corruptor?
¿Llegan a él hombres y mujeres con grandes ideales y es el accionar perverso y pervertidor del Poder el que los obliga a traicionarlos hasta llegar a hacer lo contrario y contradictorio? (…)

II.- El Poder y la Reflexión sobre la Resistencia.

La izquierda es la Voz de los Muertos
Tomás Segovia. 1994.

Mmh… el Poder… la evidencia incuestionable, el sueño húmedo de los intelectuales de arriba, la razón de ser de los partidos políticos…

Y quienes recuerdan ahora a Tomás Segovia sólo como poeta, lo hacen para escindir a ese hombre de su ser libertario. Como Don Tomás nada puede hacer ahora para defenderse y defender su palabra total, andan los homenajes de “tijera y engrudo”, editando y armando las piezas amables, dejando las incómodas para el olvido… hasta que otr@s incomod@s las recuerdan y las nombran.

Y para no interpretar sus palabras (que puede ser entendida como una forma amable de usurpación) le transcribo partes de algunos escritos.
Siempre que prevalece una u otra forma de fascismo, la verdad y la justicia toman la forma de la Resistencia.

Pero es que además puede decirse que la izquierda es constitutivamente resistencia. Sin duda la izquierda se precipitó en nuestro siglo en un insalvable error histórico, pero ese error consistió a todas luces en creer que la izquierda podía tomar el poder. La izquierda en el poder es una contradicción, bastante nos lo ha mostrado la historia de este siglo...

lunes, 5 de diciembre de 2011

Kafka revolucionario: poesía y política de un pueblo menor


A pesar de que la imagen habitual que se ha hecho de Kafka, la mayoría de la veces -no ya sin haberlo leído a profundidad, sin siquiera haberlo leído- es de oscuridad y sordidez, la de un simple testimonio de la desolación frente a un mundo terrible pero  absoluto, inevitable; cuando es más probable que se trate de algo por completo diferente. Si es cierta la anécdota que cuenta que Kafka leía a sus amigos lo que escribía en medio de atronadoras carcajadas, como si se tratara de una broma, como le gustaba pensar a Felix Guattari, es posible imaginarlo en su soledad escribiendo de la misma manera embargado por una especie de extraña alegría, como si se contara a sí mismo esa misma broma. Una extraña alegría que movería a Kafka frente a un mundo absurdo que es lo verdaderamente oscuro y terrible, para demostrar por efecto amplificador, lo despreciable y grotesco de ese mundo, y en el límite, la posibilidad y necesidad de cambiarlo. En estos términos, la literatura era su estrategia terapéutica, su manera de conservar o recuperar la salud, como posibilidad vital para existir en el mundo, su manera de resistir en un “mundo imposible”, el cual se sostiene por el principio de la obediencia incondicional de sus súbditos, pues como reveladoramente dice Kafka en América, las cadenas de la humanidad torturada están hechas de papel, quien les da la fuerza somos todos nosotros al respetar esos papeles ciega y devotamente...       



domingo, 13 de noviembre de 2011

Anonymous: operación corrupción-México



El movimiento o colectivo Anonymous es uno de los fenómenos sociales más interesantes de los últimos años ya que su capacidad de operación es a nivel mundial y comprende las dimensiones fundamentales de la información y la comunicación, recordando los inicios de las acciones del EZLN, primer movimiento social en utilizar la internet y del cual el obispo Samuel Ruiz, partícipe de la Teología de la Liberación, decía que las bombas que tenía el EZLN eran bombas informáticas, como son ahora las de Anonymous.  

Anonymous surge como una incorporación de diferentes grupos de hakers a nivel mundial que asumen una estrategia de signos y símbolos propios de la cultura de los mass media, desde el cine (la imagen de la película V de Venganza) hasta el lenguaje, los usos y códigos de interenet; así como el legado anarquista (la máscara que los identifica en sus comunicados y propaganda es la de Guy Fawkes, anarquista que en el siglo XVII intentó hacer estallar el parlamento inglés y dar muerte al rey Felipe I en aras de la libertad de culto en Inglaterra, acción que fracasó y le costó la vida en la hoguera), el pensamiento filosófico crítico radical y la práctica contemporánea del anarquismo como las concepciones de Hakim Bay (creador del terrorismo poético heredero de la Internacional Situacionista francesa) sobre internet y su potencial revolucionario;...

viernes, 28 de octubre de 2011

El Amor de Antonin Artaud

El paso de Antonin Artaud por México fue fulgurante y misterioso, como la visión que de los fenómenos estelares tenían seguramente los más antiguos de los antiguos, algo hermoso, fascinante y misterioso. Pues a diferencia de la presencia de otros escritores o artistas en México la presencia de Artaud está sellada por el signo de lo desconocido propio de su actitud sobria, seria y espiritual, que lo convirtieron en la sombra de una  humilde figura que atravesaba sobre todo el centro de la ciudad sin llamar la atención de nadie, y para los que "sabían" quien era se trataba de un extravagante intelectual secundario. Sin embargo, a diferencia de las visitas de otras figuras intelectuales por México, la presencia de Artaud es significativamente legendaria, puesto que no venía a hacer proselitismo de ningún tipo, ni a exaltar su figura siendo admirado, ni a divertirse en la cantina y el burdel en que los extranjeros suelen convertir a México. Artaud venía realmente a buscar un tesoro, el secreto de las fuerzas ocultas de la tierra roja que muy probablemente fueran aún capaces de cambiar un mundo que venía de las ruinas de la guerra y se aproximaba cada vez más a la decadencia, venía en busca de el hombre nuevo, porque el hombre se había convertido en una pila a la que le han cortado las cargas, y en busca de los elementos que harían posible una revolución-renovación del mundo.

Artaud cifró grandes esperanzas en su visita a México, no sólo en términos culturales sino también personales creía que en México y en sus indios podría encontrar la cura para su alma enferma desde muy temprana edad. Así emprende la aventura que es consignada en el maravilloso libro Viaje al país de los Tarahumaras, donde Artaud describe ceremoniosamente su experiencia espiritual en los rituales del peyote y los tres días más felices de su vida participando en ellos. Más allá de esto, poco se sabe del paso de Artaud por México.

El bello libro Artaud, todavía de Fabianne Bradu trata de reconstruir los avatares del paso de Artaud por México y la recopilación de su obra escrita en tierras mexicanas, a través de la correspondencia entre Paule Thévenin, editora de las obras completas de Artaud en Gallimard, y el amigo de Artaud y gran poeta guatemalteco radicado por ese entonces en México, Luis Cardoza y Aragón, quienes a lo largo de su cartas dan testimonios de un trabajo colectivo que sólo puede ser motivado y mantenido por el amor, una colaboración exhaustiva en la búsqueda de datos y recopilación de textos durante tres décadas...

miércoles, 19 de octubre de 2011

El miedo como estrategia del poder-Jodorowsky

Lo que caracteriza a los animales es el miedo: a cada momento temen que un rapaz se los coma. Sólo los humanos que desarrollan su Conciencia llegan a la libertad de vivir sin miedo, aceptar morir, no temer perder. Pero esta sociedad inhumana-industrial necesita que los ciudadanos vivan angustiados, semi-drogados, infantiles. Manipulados por el miedo, compran, consumen, obedecen, llenan su vacío espiritual con juegos necios, es fácil esclavizarlos. No hay que idealizar a la prensa ni a ningún medio de comunicación, todos están manipulados por los grandes y golosos capitalistas. El dinero actual es sólo simbólico, no representa una materia preciosa: es producto de especulaciones que se basan en los mercados, mercados vampiros que subsisten si los humanos-animales no pierden la confianza en el poder político constituido por actores marionetas… Todo está contaminado por el miedo. Primero que nada miedo al espacio: se nos ha dado un universo infinito en continua expansión, se nos doma para que nos parezca natural vivir en unos pocos metros cuadrados; las ciudades son cárceles con calabozos estrechos. Se nos enseña el miedo al tiempo: se exalta la juventud, se odia a la vejez, se predica un meloso “aquí y ahora” haciéndonos olvidar que la realización de la raza humana está en el futuro, y que los intentos del universo son los de crear una conciencia inmortal. Miedo a la pobreza: nos sumergen en una lucha encarnizada contra los otros para tener más riqueza, haciendo que no nos demos cuenta que la riqueza es fruto de nuestro trabajo común, nos pertenece por igual a todos. Nos vendan los ojos para que no protestemos porque unos “ricos” acumulan los beneficios de incontables “pobres”. Y el peor de los miedos, el miedo a sí mismo: adentrarse profundamente en nuestro espíritu, atravesar la tinieblas del inconsciente, para encontrar nuestro centro luminoso, libre, produce terror porque nos hace diferentes a todos los sumisos. Se educa a los niños para que sean “como todo el mundo”, haciéndolos agredir y aislar a sus compañeros “diferentes”. En fin, tengo la sensación de estar diciendo todo lo que nosotros sabemos. No le conviene a la prensa publicar noticias positivas, porque disminuyen la angustia y la gente deja de comprar sus hojas hipócritamente manipuladas. No hay un “sistema” ideal. Hay seres humanos que tienen el deber de comenzar a cambiar a este falso mundo, luchando para vencer el miedo animal que nos inyecta a diario. Fuente: http://planocreativo.wordpress.com/

viernes, 2 de septiembre de 2011

Spinoza, el Cristo de los filósofos

En su interesante artículo Spinoza, el Cristo de los filósofos: hacia una concepción deleuzeana de lo Uno y lo Múltiple, José Ezcurdia nos deja ver una interesante y por demás sugestiva interpretación de esta afirmación que Deleuze hace de Spinoza en ¿Qué es la filosofía?:

“Tal vez éste sea el gesto supremo de la filosofía: no tanto pensar El plano de inmanencia, sino poner de manifiesto que está ahí, no pensado en cada plano. Pensarlo de este modo, como el afuera y el adentro del pensamiento, el afuera no exterior o el adentro no interior. Lo que no puede ser pensado y no obstante debe ser pensado una vez, como Cristo, que se encarnó una vez, para mostrar esta vez la posibilidad de lo imposible. Por ello Spinoza es el Cristo de los filósofos, y los filósofos más grandes no son más que apóstoles, que se alejan y se acercan a este misterio. Spinoza, el devenir-filósofo infinito. Mostró, estableció, pensó el plano de inmanencia “mejor”, es decir, el más puro, el que no se entrega a lo trascendente ni vuelve a confundir trascendencia, el que inspira menos ilusiones, menos malos sentimientos y percepciones erróneas…”

Ese mismo Spinoza al que llama en el mismo texto "el príncipe de los filósofos". A decir de Ezcurdia lo que nos hace ver Deleuze es lo que hace Spinoza, mostrar el sentido radical de un Dios encarnado, un Dios inmanente, hecho carne, materia, pensamiento e infinito, un Dios absolutamente infinito.

Pues en varias cartas y textos Spinoza habla de Cristo como del entendimiento, por ende, como la totalidad de la que forma parte el entendimiento. En tales términos, que hacen pensar que Spinoza cree en Cristo, si bien a su manera, que cree en él, aunque nunca hay que perder de vista, como marrano o criptojudío, la prudencia que tenía al expresarse de cualquier manera pública e incluso clandestina en términos estrictamente cristianos.

La tesis de Ezcuardia no deja de ser sugestiva, que Spinoza es radicalmente cristiano, el primer auténtico cristiano a la manera de ese cristianismo del que Nietzsche criticaba carecer a la iglesia católica, y que traiciona el mensaje de ese espíritu libre que era Jesús, un cristianismo en el cual Dios está presente en todo en una auténtica dimensión de la eternidad donde no existe trascendencia sino pura inmanencia, un Cristo de la inmanencia absoluta que se convierte en el pensamiento deleuzeano en el concepto del plano de inmanencia: el Dios de Spinoza. Y que Spinoza entrega a la teología como un "Cristo bomba" que hace estallar las categorías escolásticas en las que se pretende fundar no solamente una manera de creer y de vivir, sino sobre todo, la estructura socio-política donde de la concepción de un Dios trascendente y lejano depende un orden jerárquico y por completo ajeno e impuesto al grueso de los hombres.

Dibujo realizado por San Juan
de la Cruz en el cual están inspirados
los cristos de Dalí.

miércoles, 17 de agosto de 2011

ILUMINISMO: Rimbaud y la Comuna

El iluminismo es la contra-cara de la ilustración, podríamos decir su elemento dialéctico espiritual, un movimiento cultural, sobre todo desarrollado en la literatura  que a partir de la descristianización de la cultura y la superación de la metafísica, busca la espiritualidad del mundo y del hombre en otras prácticas y tradiciones de la Antiguadedad, paganismo y orientalismo; o en algunas otras que convivieron con el cristianismo durante la Edad Media como la alquimia o la cábala.

En tal labor, el Romanticismo iluminista se bifurca en dos tendencias, por una parte una que se dirige fundamentalmente a la dimensión metafísica de la fe, idealismo estrictamente metafísico; y la otra, que entiende y prolonga las consecuencias sociales de una fe en la armonía universal, una especie de iluminismo social o mesianismo revolucionario... Para comprender la filiación de Rimbaud con el movimiento iluminista en su desembocadura mesianico-revolucionaria basta con considerar el prodigio de su Carta del vidente y su penúltima obra Las luminaciones título que ya deja ver la profunda filia que existe entre el poeta y todo el entramado espiritual y simbólico del iluminismo en sus dos vertientes, pero sobre todo, en la social o mesiánico-revolucionaria.

El trabajo de Pierre Gascar, Rimbaud y la Comuna, sostiene principalmente la lúcida tesis de que Rimbaud no era ni sentimentalmente fraternal ni ingenuamente humanista, sino, salvajemente comunitario condición que lo lleva a vivir La Comuna directamente y a cantarle como nadie.

domingo, 7 de agosto de 2011

Imaginación, Tecnología y Literatura

La imaginación es una facultad clave de la vida espiritual, y por ello, una maquinaria clave en la cultura en la que se juega la determnación de la forma y el contenido de lo sentido, y con ello, también de lo pensado puesto que la imaginación no trata solamente como comunmente se cree accesoriamente del entretenimiento o el ornato, sino, sobre todo, de las dimensiones fundamentales de lo que se es capaz de concebir -pensar- y sentir, que simultaneamente mueven al hombre a  actuar o lo paralizan.

Esta facultad tiene una dimensión eminentemente material e historica que es fundamental destacar para ponderar adecuadmente su importancia y su potencialidad. La imaginación no es una ni está ya dada trascendentemente sino que se encuentra en un constante devenir histórico, así, el hombre no imagina de la misma manera siempre sino que como todo en él va cambiando a partir de su propio actuar y de su interacción con el mundo. De tal manera, en un sentido materialista, la forma en que el hombre imagina va cambiando y con ello también lo hace la manera de expresar esos contenidos, el discurso artísco. Ahora bien, la imaginaicón se encuentra esencialmente articulada con la forma de percibir, con la forma de usar los sentidos que como advierte tan visionariamente Marx tmbién se encuentra en un constante cambio puesto que "la máxima obra de la humanidad es la producción de los cinco sentidos". Y en tal devenir la tecnología ocupa un papel clave, pues con ella se re-formulan las relaciones con el mundo y el uso de los sentidos, así, la manera de imaginar está en directa relación con la manera de ver y escuchar de cada época.

sábado, 30 de julio de 2011

De El Pliegue/Deleuze

Más que un átomo, la mónada es una célula, una sacristía: una habitación sin puerta ni ventana, en la que todas las acciones son internas.

La mónada es la autonomía del interior, un interior sin exterior. Pero tiene como correlato la independencia de la fachada, un exterior sin interior. La fachada puede tener puertas y ventanas, está llena de agujeros, aunque no haya vacío, pues un agujero sólo es el lugar de una materia más sutil. Las puertas y ventanas de la materia sólo abren o incuso sólo cierran  desde afuera y sobre el afuera... La arquitectura barroca puede definirse por esa escisión de la fachada y del adentro, del interior y del exterior, la autonomía del interior y la independencia del exterior, en tales condiciones que cada uno de los dos términos relanza el otro... Lejos de ajustarse a la estructura, la fachada barroca sólo tiende a expresarse a sí misma mientras que el interior se inclina de su lado, permanece cerrado, tiende a ofrecerse en su totalidad desde un solo punto de vista a la mirada que lo descubre, "cofre en el que reposa lo absoluto".

Lo que hará posible la nueva armonía es, en primer lugar, la distinción de dos pisos, en la medida en que resuelve la tensión o distribuye la escisión. El piso de abajo se encarga de la fachada, y se alarga agujereándose, se curva según los pliegues determinados de una materia pesada, constituyendo una habitación infinita de recepción o de receptividad. El piso de arriba se cierra, puro interior sin exterior, interioridad cerrada en ingravidez, tapizada de pliegues espontáneos que ya sólo son los de un alma o un espíritu. Por eso el mundo barroco, como ha mostrado Wolfflin, se organiza según los vectores, el hundimiento abajo, el empuje hacia lo alto. Leibniz hace coexistir la tendencia de un sistema pesado a encontrar su equilibrio lo más bajo posible,  justo donde la suma de las masas ya no puede descender más, y la tendencia a elevarse, la más alta aspiración de un sistema en ingravidez, justo donde las almas están destinadas a devenir razonables,  como en un cuadro de Tintoretto. Que uno sea metafísico y concierna a las almas, que el otro sea físico y concierna a los cuerpos no impide a los dos vectores componer un mismo mundo, una misma casa...

El entierro del conde de Orgaz

domingo, 24 de julio de 2011

El Barroco y la resistencia Latinoamericana

Resulta deslumbrante la relación y coherencia que existe entre las diferentes dimensiones de la realidad humana, específicamente el sentido que entrañan las creaciones culturales humanas como el arte y el pensamiento.  ¿Cuánto de desconocido hay en una obra del espíritu? Así la labor exegética o interpretativa adquiere todo su sentido a lo largo de los siglos, ya que no solamente el mundo sino también el hombre es un conglomerado de cosas por descubrir.

Particularmente el arte barroco es un prodigio de cosas por descubrir y entender, tanto en la dimensión artística como filosófica, pues resulta ser un acontecimiento que se presenta tanto en el arte como en el pensamiento, así de las portentosas catedrales posrenacentistas pasamos inmediatamente al pensamiento protomoderno de Leibniz y Spinoza. Y en ambos, advertimos el dramático tránsito de una época a otra pues en el barroco presenciamos la resistencia  a desaparecer del mundo medieval conviviendo con los novísimos elementos de la modernidad, de Dios a la inmanencia de la libertad, la igualdad y la razón, todo contenido en un mismo continente: lo mejor del pensamiento metafísico-escolástico conviviendo con los elementos heterogéneos de la modernidad.  Así, el barroco resulta ser la resistencia a desaparecer y simultáneamente el impulso del cambio y lo diferente, el modelo vital y plástico de la vida que persevera en el ser pero también tiende a la superación de lo que es, como lo advierte Deleuze desde la perspectiva en que se sitúa, la gran identidad Spinoza-Nietzsche, en sus estudios sobre el pliegue y sus interpretaciones de la obra de Spinoza y Leibniz.


Templo de la Compañía de Jesús de Quito.

Por su parte, Bolívar Echeverría capta las potencialidades del barroco para la problemática de América Latina eminentemente una situación de resistencia en el ámbito de la modernidad capitalista y racista que en su inercia tiende al sometimiento y a la destrucción de lo americano en todos sus sentidos desde lo étnico hasta lo cultural...

martes, 12 de julio de 2011

Blanqui y Spinoza


“El universo es infinito en el tiempo y en el espacio, eterno, sin límites e indivisible. Todos los cuerpos, animados e inanimados, sólidos, líquidos y gaseosos, están conectados el uno con el otro por las mismas cosas que los separan. Todo está conectado. Con la excepción de los astros, que permanecen en el espacio, absolutamente vacío sin duda,  y sin embargo, con las tres dimensiones, altura, anchura y profundidad, espacio indivisible e ilimitado.”
                                                                                                    Blanqui

Louis-Auguste Blanqui es un importante revolucionario y teórico poco reconocido, y sin embargo, fundamental, por haber lidereado el movimiento radical de la Comuna y definido en gran medida lo que habrían de ser los movimientos sociales del siglo XX, particularmente el movimiento político estudiatil que empezaría con él y llegaría hasta el 68 en todo el mundo (antes de él el movimiento estudiantil se reducía en su acción exclusivamente al espacio académico). En gran medida este desconocimiento es debido a la crítica hecha contra él desde el llamado marxismo científico que consideró inapropiadas y utópicas las posiciones tan radicales de Blanqui en la Comuna, que llevaron según estos a la derrota del movimiento

Existe un opúsculo, que Blanqui escribe en una de sus estancias en la cárcel, La eternidad a través de los astros, en el cual deja ver una concepción sobre el infinito que parece haber animado en el fondo su espíritu inquebrantable y rebelde, aun en la soledad y el encierro de la prisión y bajo condenas de muerte impuestas en varias ocasiones. Una concepción del infinito que parte de la consideración de las estrellas y el espacio infinitos, sumamente cercana al Dios infinito de Spinoza -y habría que señalar también que muy próxima a la concepción de Dios dada por Maimónides en la Guía de los perplejos-, y como aquel, Blanqui parece sacar de esa concepción una potencia infinita y una voluntad inquebrantable frente a todas las adversidades; potencia y voluntad que se dirijen, en el límite, hacia un cambio social radical...

martes, 21 de junio de 2011

El filósofo artista y el arte de la filosofía

*Ponencia pronunciada en el marco de las Primeras Jornadas sobre Gilles  Deleuze, celebradas en junio de 2011 en Mar del Plata Argentina.




sábado, 4 de junio de 2011

¿Qué es la poesía? FERLINGUHETTI


¿Qué es la poesía? Un payaso ríe, un payaso llora, dejando caer su máscara.

La poesía es la Gran Memoria, cada palabra una metáfora viva.

La poesía es el ojo del corazón, el corazón de la mente.

La poesía es el último refugio interior.

La poesía como ancla en tu vida es tan buena como las profundidades que alcanza.

La poesía como primer idioma antes de la escritura canta en nosotros todavía, una música muda, una música incipiente.

La poesía es el grito del corazón que despierta ángeles y mata diablos.

La poesía: una mujer desnuda, un hombre desnudo, y la distancia entre ellos.

La poesía es una melodía muda en la cabeza de un animal mudo.

La poesía mantiene acorralada a la muerte. 

Los poemas satisfacen anhelos y recompenen la vida.

Y todas las aves del universo congregándose en un sólo árbol gigantesco.



domingo, 29 de mayo de 2011

Estudio de la 2a Tesis sobre la Historia

Esta segunda tesis es un pequeño sistema solar que gira en torno al concepto de redención de la vida, un pequeño microcosmos cuyo sol es la fuerza mesiánica que hace girar en torno suyo el resto de elementos-planetas. Un grabado o estampa, tan sintética como eficaz, con la que Benjamin contrasta la idea de felicidad que entraña el historicismo convencional, y con él la "idiosincrasia" generalizada en el occidente moderno y capitalista, frente a una idea de la felicidad propia de una manera completamente diferente, materialista, de entender la historia y la vida humana.

A diferencia del psicólogo y primer fisiólogo Hermann Lotze (1817-1881) quien pensaba que lo característico-esencial del hombre es su individualismo, y con ello, solamente su interés en sí mismo y su confinación absoluta al tiempo del presente que únicamente puede desembocar en una felicidad de lo actual individual, afirmativa del orden positivo de lo que es; Benjamin piensa en los mismo conceptos (felicidad, hombre, tiempo) desde coordenadas completamente opuestas, pues para él sí hay una felicidad que puede despertar y existir en función de la envidia de otro tiempo, una felicidad que es producto de la íntima unidad y colectividad que existe entre los hombres, pues ahí donde Lotze sólo ve al individuo egoísta del presente, Benjamin ve siempre al integrante de una comunidad que es capaz de darse cuenta de esa comunidad al sentir que de algún modo comparte el mismo aire que el que otros hombres antes que él han respirado, y con ello, que en realidad, nada le pertenece exclusivamente como in-dividuo, por el contrario, lo que es y podrá ser lo comparte con los que han sido, y ellos, lo comparten con él. Así, la felicidad se cifra también en lo que pudo haber sido la felicidad para aquellos e incluso la nuestra compartiéndola con ellos, hablando con esos magníficos hombres y entregándose a nosotros esas hermosas mujeres del pasado hermanos y hermanas de nuestros prójimos (prójimo-próximo), que sin embargo, de algún modo u otro es posible realizar a través de la redención, en la cual, la felicidad de aquellos hombres y mujeres del pasado se convierte en justicia del presente que es también la felicidad y la justicia del pasado. En estos bellos términos lo expresa Benjamin.


domingo, 15 de mayo de 2011

La máquina de guerra y resistencia cutural mexica: La Mitotiliztli

En el atardecer del lunes 14 de agosto de 1521 el sol se ocultaba más lentamente que nunca tras las montañas del Valle de México, para los habitantes de Mexico-Tenochtitlan era el atardecer de la víspera. La rendición de la ciudad había sido decidida ese día, en medio de un sitio en el que todas las familias habían sido mutiladas y todos los habitantes violentados durante tres meses con la muerte del hambre, la sed y la peste de la viruela. El mundo no sería nunca más el mismo y no se vislumbraba en el horizonte otro amanecer diferente al del horror de esos días. Unas horas antes, se había llevado a cabo la última reunión del huei tlathoucani, el consejo de gobierno donde, debido a que habían muerto casi todos los hombres nobles y de la casta de guerreros, se decidió declarar la rendición al día siguiente. Para tal efecto, se encomendó a un joven de 22 años la misión de entregarse a los invasores como muestra inequívoca de la rendición, y se dice, desde hace cuatrocientos años en la tradición oral, que también se encomendó a ese joven llamado Cuahutémoc dar un mensaje a ese pueblo que a través de él iba a declarar su rendición al día siguiente. Algunos dicen que el mensaje dado palabra por palabra por los sabios tlamatinimes integrantes del Tlathoucani fue proclamado por Cuahutémoc antes de entregarse, en el gran patio del templo que hoy se llama “La plaza de la constitución de Cádiz”, o bien, que iba dando tal mensaje en la canoa que lo llevaba junto con dos acompañantes en el camino de Tlatelolco, rumbo a las manos del invasor.

El mensaje que dio entonces, se dice, comenzó de la siguiente manera:

Nuestro Sol se ha ocultado,
nuestro Sol se ha escondido,
y nos ha dejado
en la más completa oscuridad...
Sabemos que volverá a salir
para alumbrarnos de nuevo,
pero mientras permanezca allá
en la región del silencio
debemos unirnos,
ocultando en nuestros corazones
todo lo que amamos
y sabemos es un gran tesoro


La maquinaria de resistencia social de la cual consideramos a La consigna de Cuautémoc pieza clave, es un sistema de conocimientos, discursos y prácticas transmitidas de generación en generación a través de la tradición oral o pequeñas agrupaciones semi sectarias relacionadas entre sí que cultivaban todo ello en la semiclandestinidad: ideas, creencias, costumbres, formas de organización, y en el límite, revueltas armadas en levantamientos sociales regulares a lo largo de una historia nacional también semiclandestina que no es consignada en los grandes discursos histórico-nacionales.

Del numeroso conjunto de prácticas y fenómenos históricos del sistema de resistencia cultrural, y como una muestra del mismo, sólo abordaremos aquí el caso ejemplar del movimiento cultural de la danza ritual mexica, mitotiliztli, en la expresión del denominado movimiento tradicional de los danzantes concheros. Si bien esta práctica de resistencia como toda resistencia parecería eminentemente negativa, en realidad, como también toda práctica de auténtica resistencia, es en extremo positiva, presentándose como negativa sólo lo necesario para poder sobrevivir y reconstituirse, pues de lo contrario sucumbiría a la articulación de fuerzas del presente. Así, en cada uno de los elementos sincréticos de aparente destrucción hay importantes elementos positivos conservados y cultivados a la sombra de lo aparente. Como aquella sofisticada práctica de ocultamiento y codificación de los judíos que se hacían llamar a sí mismos “criptojudíos“, y por el mundo cristiano “marranos”, en su persecución durante tres siglos, quienes, también se vieron forzados a ocultar tras el cristianismo sus creencias, cultura, cotidianidad, y cuando fue preciso, hasta a ellos mismos, en una práctica de recodificación de textos y de la vida misma, también auténtica máquina de guerra, llamada encriptamiento, como si en una cripta se encerraran a sí mismos para sobrevivir, esperando al mismo tiempo, algún día renacer a la luz.

jueves, 5 de mayo de 2011

A propósito de Nietzsche, Benjamin y Cortázar: sobre el cómo y el por qué parar el tiempo.

Tanto Walter Benjamin como Friedrich Nietzsche en sus grandes obras de crítica radical a la cultura de Occidente, se ocupan de un modo prioritario de la historia, pues sobradamente comprenden la función estratégica que cumple dentro del discurso teórico y la función práctica del tiempo, homogéneo, vacío y lineal, en la configuración de la realidad, tanto social como subjetiva. Un testimonio de esta convergencia lo da el epígrafe utilizado por Benjamin en la tesis XII de las tesis Sobre el concepto de historia, en el que cita un fragmento de la intempestiva De la utilidad y de los inconvenientes de los estudios históricos para la vida, en la que Nietzsche reflexiona ampliamente en torno a la crítica de la historia y una propuesta alternativa de historicidad vital: Necesitamos de la historia, pero la necesitamos de otra manera a como la necesita el holgazán mimado en los jardines del saber.     

La crítica radical del concepto de historia es llevada a cabo por estos pensadores fundamentalmente en tres textos. Benjamin la desarrolla en el texto póstumo y tristemente célebre de las tesis Sobre el concepto de historia (1939), mientras que Nietzsche, la desarrolla ampliamente en la intempestiva De la utilidad y de los inconvenientes de la historia para la vida (1874), y colateralmente, en La genealogía de la moral (1887).
Para ambos pensadores la historia como se ha concebido y hecho tradicionalmente es un instrumento de conformismo, sometimiento y enajenación, tanto del mundo como del hombre, al hacer pasar como el devenir total del mundo los principios dogmáticos de los que parte y las versiones de los hechos que selecciona y articula en el relato de su discurso, en virtud de servir al proyecto moderno-capitalista ; y negando completamente hechos, versiones y posibilidades que se salen o contradicen tal relato.

miércoles, 4 de mayo de 2011

Estudio de la 1a Tesis sobre el concepto de historia

Una de las dimensiones más problemática del discurso de Benjamin es su relación con el pensamiento teológico. Relación que es referida de una manera "oscura" en la primera de Las tesis sobre el concepto de historia y es desarrollada a lo largo de todo el texto con el uso de imágenes, pero sobre todo, con conceptos de la teología y la mística judía.

Desde que las tesis fueron escritas la posición respecto a tal dimensión fue no solamente polémica sino incluso polarizante en su recepción e interpretación. Desde la lectura y valoración que hicieron de ella los dos amigos más cercanos de Benjamin, Bertolt Brecht y Gershom Scholem, uno marxista y el otro uno de los estudiosos de la tradición judía más importantes del siglo XX, el primero descalificándola absolutamente y el otro desconcertado por su mezcla con el elemento marxista,  quienes reflejan esta polaridad, aparentemente, las más de las veces, irreconciliable.

La multiplicidad de autores serios que leen e interpretan a Benjamin asumen generalmente una posición radical a favor de la dimensión marxista, pero raras veces, una asimilación de ambas dimensiones, la revolucionaria marxista y el mesianismo teológico, con lo cual, escinden el pensamiento del autor y ejemplifican las razones y preocupaciones por las cuales Benjamin emprende una labor tan singular: combatir el reduccionismo racionalista y el dogmatismo positivista eurocéntricos en que generalmente desemboca el pensamiento revolucionario, y que Benjamin identifica tan claramente en la conformación de los conceptos de historia, tiempo y progreso, que permean y definen no solamente el pensamiento capitalista sino también el pensamiento pretendidamente crítico y revolucionario.


martes, 19 de abril de 2011

La Historia y los ecos de Marx, Nietzsche y Benjamin.

La historia desde siempre ha sido algo muy importante quizá tan importante como la poesía para el espíritu de los hombres y los pueblos, y en cierto grado quizá, ambas, historia y poesía, han estado unidas en los momentos originarios de los pueblos, al nombrar los relatos fundacionales de la comunidad a través de relatos míticos.

Los relatos que cuentan lo que se ha sido para ser lo que se es ahora, desde siempre y para siempre, parece que tendrán una importancia fundamental para los hombres. Esto, como muchas otras cosas fundamentales más, los poderes establecidos lo saben, o mejor dicho, lo intuyen o han llegado a conocer no por el gran ejercicio de pensamiento y abstracción que se requiera para llegar a ello como por la práctica de la violencia y el sometimiento crudos que muestran sin más los resortes y engranes de los hombres, así, los poderes han adquirido gran conocimiento en torno al sometimiento y la rebeldía de los hombres, ejemplo, la importancia y la forma de entristecer a los hombres, de enajenarlos, de determinarlos-amaestrarlos como animales o sub-humanizarlos como bestias.

Particularmente el monopolio de la historia es uno de los recursos fundamentales del poder para eliminar la posibilidad individual y colectiva de la autoconciencia y la emancipación, haciendo olvidar a los hombres de qué son capaces o quién es el enemigo, lo cual ha sido sabido también por los pueblos que se han aferrado a conservar sus relatos e historia. En la filosofía, como estrategia de la vida o terapia emancipatoria, también existe este conocimiento desde la antigüedad, basta pensar la obra de Diógenes Laercio, sin embargo, a partir de la modernidad y el individualismo hay un movimiento deshistorizante o historizante a la manera tiránica, reivindicando la historia de dominación, donde todo y todos se confunden con la versión del vencedor,  pralela a la cual se hace correr una historia de la filosofía que selectivamente empareja a la escuela o al pensador idóneo para legitimar el poder en turno. 


miércoles, 13 de abril de 2011

El carácter revolucionario de las Tesis sobre la historia de Walter Benjamin

Las Tesis sobre la historia, con sus apenas diez páginas, es, sin lugar a dudas, uno de los mejores textos (si no es que el mejor) escritos en el siglo XX. Hoy en día tan célebre como trágica es la historia negra que rodea su redacción, conservación y publicación. Es el escrito de un hombre que huye, de un judío perseguido,[1] que en su huida ante la avanzada de la muerte, encarnada en el fascismo nazi y franquista, llevaba consigo un puñado de papeles periódicos, servilletas y hojas sueltas, donde apuntaba apresuradamente las respuestas y alternativas al infierno que se aproximaba para la humanidad, y ya hacía sentir sus horrores. Texto que tras el suicidio de su autor como forma de escapar a los verdugos[2], y cometido en la frontera franco-española, fue guardado y cuidado celosamente hasta que fue publicado en 1942 en Los Ángeles, en la revista del Instituto de Estudios Sociales de Frankfurt, por Horkhaimer y Adorno poco antes de su exilio a Estados Unidos.

Se trata del último texto de Walter Benjamin, escrito entre 1939 y 1940, si bien escrito a instancias de la guerra como una profunda y radical crítica a la cultura occidental, en concreto a los conceptos claves (tiempo, historia, progreso) que hacen posible o legitiman la barbarie del fascismo y el capitalismo; es la culminación de un pensamiento profundamente crítico y sofisticado que maduró a lo largo de la vida de un artista y un filósofo, de un conocedor profundo y ejecutante del arte más auténtico y radical (del Romanticismo alemán a las vanguardias del siglo XX) y de un riguroso filósofo marxista con inclinaciones por la mística judía, lo que hace posible la obra de un filósofo creativo, un filósofo-artista, o de un revolucionario sui generis, que es capaz de ir más allá de los límites del pensamiento y del arte, reducidos como positivismo a la celebración, resignación o testimonio de los hechos, para hacer capaz, otra vez, a la filosofía de analizar, diagnosticar, y lo más importante, proponer y andar el camino de otro mundo posible y necesario alternativo al infierno, como diría Deleuze, en que han convertido al mundo la estupidez y la bajeza.

miércoles, 6 de abril de 2011

EL DIOS DE SPINOZA II. El reverso de la tradición judía.

Una de las tradiciones más importantes recuperadas por Spinoza en su filosofía panteísta es la judía, pero no en términos generales, particularmente una corriente que se destaca a lo largo de los siglos como un portento de pensamiento crítico y liberador, una forma de judeidad que no se cifra ni en la religión, ni en la fe, ni en la raza, ni en la sangre, ni en la nación; una judeidad que se funda, concibe y cultiva como un proyecto civilizatorio donde lo más importante es además del pensamiento y la razón, la justicia y la verdad entre los hombres en la vida de este mundo.

La corriente de judeidad que recupera Spinoza se remonta a los tiempos bíblicos en los que se presenta como parte de la díada de la corriente Yavista (del Dios Yavé) y Eloista (del Dios Eloi o Adonai), en la que se divide el texto bíblico, los textos de la tradición yavista y los textos de la tradición eloista, no solamente por la manera de "llamar" a Dios, sino, sobre todo, por los contenidos espirituales y culturales-civilizatorios de cada una. Puesto que mientras la corriente yavista concibe a un Dios nacional guerrero y conquistador más cercano al politeísmo que promete a Israel, como a su hijo pródigo, dominar sobre todos los pueblos de la tierra y que su progenie prolifere sobre la tierra como los granos en la arena y las estrellas en el cielo, (en realidad nada extraordinario en relación con los dioses de otros pueblos) a cambio de la obediencia incondicional y ciega de su fe; mientras la corriente eloista concibe a un Dios impersonal, inconcebible, innombrable, irrepresentable e inapropiable en los términos de un monoteísmo radical que se concibe a partir de Dios como de la categoría más abstracta posible, y por lo tanto, de una espiritualidad muy cercana a la razón, en la cual, la divinidad parece estar tan próxima como lejana o inabarcable, por ser lo absoluto, y por ello, paradójicamente, implicarlo todo, tanto al hombre mismo como a lo conocido y lo desconocido, lo próximo y lo lejano (como el tloquenahuaque mexica, el "señor del cerca y del junto") y así, la corriente eloista asume una actitud espiritual más cercana a la ética y a la justicia que a la superstición, pues lo importante no es obedecer y creer, sino sobre todo, comprender y actuar en consecuencia, lo que se ha cultivado intensamente a lo largo de los siglos en la cábala, la mística y la filosofía judía.


                                  Cuadro negro de Kasimir Malevich, donde trata de expresar el absoluto.
                                                        Se convirtió en el símbolo de su vida que lo acompañó en su funeral, y
                                                        acompañó en sus luchas a  grupos anarquistas de obreros rusos

lunes, 28 de marzo de 2011

NIETZSCHE: AVISADOR DEL FUEGO

Antes que Benjamin y la Escuela de Frankfurt, Nietzsche habla de la barbarie que se aproxima en Alemania. Desde su visión aristocrática crítica ve aproximarse el futuro fatídico de Europa en el siglo XX, el avance de la chusma y la catástrofe civilizatoria en nombre de estupideces como la raza y la superioridad sajona o aria. Nietzsche a su manera, es también un avisador del fuego, con su mirada en las alturas, desde la región de los fríos hiperbóreos, como un centinela ve con una mirada de desprecio aproximarse con sus banderas, uniformes e insignias a las huestes de los bárbaros, los esclavos, el reino de la barbarie y la estupidez.

Qué lejos estaba Nietzsche de los “hombres” de su tiempo y su latitud, profunda, trágicamente lejos. Y qué lejos están todavía de entenderlo en Europa y en los satélites, sucursales, europeos que son las academias de filosofía.
                                                     
PRIMAVERA DE 1884

                                                                          194

“Primera cuestión: el dominio de la tierra es anglosajón. El elemento alemán es un buen fermento que no sabe dominar. Tan sólo porque tiene que tratar con pueblos fatigados y ancianos, el dominio de Europa será alemán. Es su barbarie, su cultura atrasada, la que le dará el poder.

Francia está por delante en el terreno de la cultura, un signo de la decadencia de Europa. Rusia tiene que convertirse en el señor de Europa y Asia; ha de colonizar y conquistar China e India. Europa se encuentra hoy como lo estuvo Grecia bajo el dominio de Roma...

sábado, 19 de marzo de 2011

San Ernesto de la Higuera


Es notable la manera en que el discurso popular habla y concibe aún hoy los hechos más significativos de la realidad en la forma de mito o  relato legendario, aquellos hechos que tienen que ver con su existencia, su liberación o su resistencia a desaparecer. En América Latina los pueblos siguen existiendo y siguen soñando dormidos o despiertos, pues eso son los mitos, los sueños colectivos de un pueblo, las esperanzas fundadas en el pasado o en el futuro, que no una simple ficción o mentira, sino relatos fundacionales para una comunidad, la dimensión "irracional" pero intuitiva, afectiva y simbólica con la que el hombre tiende a dar sentido a su realidad, incluso en la modernidad donde se exalta dogmáticamente la razón el hombre funda y da sentido a partir de relatos míticos findacionales como el progreso,  la ilustración, la democracia o el contrato social que más que ser una realidad objetiva y mesurable son imágenes y relatos ficticios con los que el hombre moderno funda sus esperanzas y la legitimidad de su actuar.


Un relato legendario más bien popular es el del Che Guevara en Bolivia, que como Zapata en México o Massanielo en Nápoles, pasa de boca en boca con el aliento de la esperanza y la confianza en la propia comuidad o los integrantes de la comunidad. Se cuenta que la última anciana que vió vivo al Che en Bolivia cuando este se encontraba arrestado, dijo a un reportero haberle dado su última sopa, que el Che estaba esposado y entonces ella les pidió a los soldados que le desataran las manos para que pudiera comer su sopa, y que al estar con las manos libres y antes de comer, el Che le preguntó si los demás compañeros ya habían comido, y después el Che la miró con una mirada con la que no podían mirar los ojos de los soladados. La anciana contaba ese relato con aquel plato en las manos donde el Che había comido su última sopa, en un poblado llamado la Higuera, donde se santificó al Che Guevara con el nombre de San Ernesto de la Higuera.

domingo, 13 de marzo de 2011

LOS MISTERIOS DE JUAN RULFO

La obra de Juan Rulfo es un momento y un espacio fundamental de la cultura mexicana y latinoamericana, es como una especie de sueño con los ojos abiertos, como un momento de visión, como el oráculo de estos pueblos. En su obra Rulfo habla con la voz auténtica de los pueblos americanos, o para decirlo mejor, como si fuera un poseso, los pueblos americanos hablan a través de la obra de Rulfo, de sus vidas, sus dolores, sus sueños, sus sentimientos y sus desgracias de una manera tan extraña, tan enigmática y misteriosa como sublime son las imágenes de las que rebosan sus relatos, hojas y flores innumerables de un  bosque misterioso. Pues como dice Heriberto Yépez, Rulfo es un poeta y no uno de tantos ni de los mejores, es el más grande, y las pruebas son cada una de esas trescientas páginas que integran la totalidad de su obra (una novela breve y dieciséis cuentos) y donde no sobra ni una sola palabra, al contrario, trescientas páginas que comprenden miles de palabras, imágenes y pensamientos más que los que ahí están dichos, lo que nos deja ver Rulfo en su complejidad y su misterio apenas es como dicen los críticos profesionales la punta de un iceberg que se sostiene sobre uno o muchos mundos completamente increíbles, sus palabras son el claro de un bosque apenas alumbrado por la pálida luz de la luna, sus páginas están hechas de sombras.                    

Cuando se trataba de averiguar para entender el prodigio, de dónde sacó Rulfo su lenguaje, sus expresiones, sus personajes, la vida que amasó como palabras para convertirla en los más grandiosos relatos escritos en estas tierras, las respuestas eran más preguntas y confusión, que él mismo alimentaba, se averiguaban los episodios de una leyenda o de un relato fantástico que no pocas veces entraban en contradicción unos con otros. Así se ha identificado más de una vez el lugar "verdadero" de su nacimiento en varios pueblos de Guadalajara y Guanajuato; se ha explorado una infancia atroz llena de muertes que empiezan a contarse a partir de la del padre cuando él tenía seis años, y es seguida, casi inmediatamente por la de su madre y lo hacen terminar en un orfelinato jesuita; se han buscado los pueblos fantasmas de Comala y La Media Luna y a sus habitantes fantasmas; se ha rastreado la historia de su familia, donde se habla de tíos abuelos incestuosos, de un abuelo y un padre hacendados, este último muerto como su personaje "Pedro Páramo" en manos de un peón ebrio. Y, por último, se han barajado los testimonios del propio Rulfo quien hacía del laconismo, la mentira y el humor negro una forma de literatura ha decir de Arreola.